5 formas para terminar con el shelfware
En este post te cuento las 5 formas que podés utilizar para terminar con el shelfware de una vez por todas.
Si seguiste los posts del blog de Wetcom de las últimas semanas, seguramente te quedaste con las ganas de saber cómo terminaba toda la historia del shelfware.
En función de esto, decidí armar un listado de las formas con las que se puede terminar el shelfware.
Hace unos años, en Wetcom nos dimos cuenta de que las actividades no planificadas estaban afectando los controles de cambio y los proyectos tecnológicos de las empresas en general.
Dentro del tipo de trabajo de un área de IT es de las que menos valor aportan y más tiempo de los talentos consumen.
Es por esto, que diseñamos un servicio que incluye la implementación de nueva tecnología, mantenerse en las últimas versiones de las ya implementadas y tener un soporte proactivo y reactivo en caso de ser necesario.
Entre otras cosas, el Continuous Delivery de Wetcom se encarga de poner en marcha las soluciones que vendemos y de actualizarlas año a año.
Esto hace que el ROI sea mucho más rápido, ya que las soluciones entran en producción sí o sí.
Tenemos un lema con respecto a esto: con Wetcom, no hay shelfware.
Esto lo hacemos por medio del Continuous Delivery. Ahora, si no contás con el servicio de Continuous Delivery de Wetcom y querés hacerlo por tu cuenta, las siguientes son las 5 formas que podes utilizar:
1. Compras adecuadas para evitar el shelfware
Cuando les contaba sobre las causas del shelfware, uno de los puntos eran las compras de tecnología.
No comprar productos que no se necesitan ni se pueden implementar.
Hay que validar muy bien con las áreas técnicas la demanda real y la capacidad de ejecución antes de emitir una orden de compra.
Del mismo modo aplica para la contraparte, el socio tecnológico elegido tiene que tener la capacidad de ejecución para poner en marcha las soluciones en un tiempo adecuado para que el ROI no de muy lejos.
2. La selección del socio tecnológico
Siguiendo con el punto anterior, si el socio tecnológico elegido no tiene la capacidad de poner en marcha la tecnología, será muy difícil no caer en el shelfware.
Si bien es difícil entender si el proveedor tendrá la capacidad de implementación en ese momento en particular, los fabricantes de tecnología definen esquemas de competencias que les permiten a los potenciales clientes entender el conocimiento y experiencia que tienen sus partners.
Por ejemplo, VMware tiene dos esquemas de competencias de negocio y de servicios. La competencia de negocio certifica que el canal puede vender un producto, y tiene conocimiento hacerlo. Las competencias de servicios permiten a un cliente saber si el partner tiene el conocimiento y la experiencia suficiente para implementar.
Estas son las competencias que tenemos en Wetcom sobre tecnologías VMware.
Te recomiendo que antes de definir un partner tecnológico, hagas las validaciones de capacidades del mismo modo que harías con una persona que vas a sumar a tu equipo.
Si querés validar experiencia, podés hacerlo haciendo clic en este enlace para las competencias de VMware y en este otro para las competencias de Veeam.
3. Planificación adecuada
En algunos casos, el problema no es la compra ni el socio tecnológico, pero sí, el momento. Como les comentaba en el post anterior, si el backlog de trabajo no tiene lugar ni para un alfiler, pensar en implementar nueva tecnología es demasiado complejo.
Es por esto que una de las formas de evitar que se produzca el shelfware es planificar los proyectos tecnológicos de forma inteligente.
4. Definición y puesta en marcha de un plan de adopción
Algunos productos se implementan y es suficiente para que entren en funcionamiento y sean utilizados. Existen otros tipos de soluciones, sobre todo las que tienen que interactuar con muchas personas, que si no se presta atención a la adopción, las probabilidades de fracaso del proyecto son altas.
En este tipo de casos, los proyectos pueden salir bien desde el punto de vista tecnológico, pero desde el punto de vista del “uso”, pueden ser un fracaso.
Un ejemplo de este tipo de proyectos tecnológicos son los de nube privada donde los usuarios de TI prefieren seguir haciendo uso de las herramientas con las que venían trabajando. Otro ejemplo es el de proyectos de VDI donde los usuarios se resisten a utilizar dispositivos como thin clients.
Para que este tipo de tecnologías no se conviertan en shelfware, es clave incluir dentro de los proyectos un plan de adopción tecnológica.
5. Migración a la nube
Otra de las opciones es la adopción de soluciones cloud. Las soluciones de software cloud pueden ayudar con salidas a producción muy rápidas.
Al no tener que pasar por un proceso de implementación, el ROI puede ser más corto y con un buen plan de adopción u onboarding podemos sortear rápidamente el shelfware. Esta opción parece muy buena pero también puede ser un arma de doble filo.
Si no nos aseguramos de salir a producción y que la solución se use, podemos encontrarnos con un gasto recurrente que mes a mes nos puede perforar el presupuesto de IT.
Este es el primer listado de las opciones que tenés para eliminar el shelfware. Si tenés software de VMware y Veeam que no pudiste poner en marcha todavía, ponete en contacto con nosotros que podemos ayudarte.